Como Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras, COPINH y OFRANEH reivindicamos la poderosa frase de Berta: Los pueblos sabemos hacer justicia.

Como Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras, COPINH y OFRANEH reivindicamos la poderosa frase de Berta: Los pueblos sabemos hacer justicia.
Este #8M nos llama la acción colectiva entre quienes a lo largo de los años y los territorios hemos construido alianzas feministas, hoy nos juntamos para tomarnos la calle que nos ha sido tan negada a las mujeres; nos tomamos la calle como grito contra la impunidad, como ruptura de los mandatos patriarcales y para continuar caminando juntas nuestra política de memoria, justicia y vida.
Nos tomamos la calle para reconocer nuestros caminos, las cosas a las que nos hemos enfrentado históricamente las mujeres desde lo personal, nos tomamos la calle como acto político para manifestar las formas diversas en que hemos colectivizado nuestras fuerzas para hacer frente a un sistema que, por ser mujeres, nos asesina y es altamente violento y nocivo para nosotras.
Seguimos poniendo en lo público nuestras demandas, exigencias y luchas que hace más de una década continúan vigentes hasta hoy; en todas nuestras acciones, pronunciamientos y manifiestos, y este 8 de marzo reafirmamos las razones por las que seguimos luchando como DEFENSORAS.
Berta Cáceres Flores, compañera defensora, sus hermanas de lucha seguimos las jornadas para que la utopía por adelantado sea sendero y canción.
No olvidamos a todos tus agresores y a quienes acabaron con tu vida. Hasta que la justicia alcance a los banqueros de la muerte y sus nombres jamás se borren del archivo de la maldad en esta tierra.
Aquí estaremos con su recuerdo vivo entre nosotras, Berta, con sus palabras y las diversas rutas que ensayamos entre todas para emancipar las vidas y los territorios.
En nuestra asamblea general manifestamos que seguiremos luchando por:
1. La desmilitarización completa de los territorios porque donde hay hombres armados las mujeres, las infancias y la juventud estamos en riesgo.
2. La autonomía por los cuerpos de las mujeres que merecemos la vida plena y el placer.
3. Autodeterminación de las comunidades indígenas y negras en sus propios procesos políticos.
4. El desmantelamiento de las ZEDE en todo el territorio nacional.
5. Nos manifestamos enérgicamente contra las agresiones a las disidencias sexuales, particularmente las defensoras mujeres transexuales y la violencia que se ejerce en contra de ellas.
6. Continuaremos luchando porque los asesinos intelectuales de Berta Cáceres sean llevados a la prisión y se denuncien sus vínculos con los poderes fácticos.
7. Lucharemos por que la investigación del asesinato de Margarita Murillo y de Mirna Suazo conduzcan a la justicia y reparación para sus familias y compañeras.
8. Para que todos los crímenes en contra de todas nuestras luchadoras históricas sean investigados y porque sus asesinos paguen por la preciosa sangre de nuestras hermanas.
9. Nos pronunciamos a favor de todos los derechos para las trabajadoras domésticas remuneradas que viven la mayor explotación en el ámbito de las mujeres trabajadoras.
10. Seguiremos presionando hasta derogar las leyes lesivas a nuestros derechos tales como la ley de empleo por horas, ley de escuchas, la ley de secretos, el código penal de la impunidad.
11. Continuaremos acompañando la lucha del pueblo garífuna por la aparición con vida de nuestros hermanos desaparecidos de la OFRANEH.
Cada 25 de enero la cultura patriarcal intenta ocultar el verdadero carácter histórico y político que tiene este día con flores, regalos y frases que hacen referencia al sacrificio y al amor incondicional de las mujeres.
Nosotras que llevamos la memoria en las plantas de los pies y en los nombres de las que caminaron antes la organización y la lucha por la dignidad de las mujeres y sus pueblos sabemos que en lo cotidiano de este país y sus procesos de transformación estamos las mujeres construyendo hoy otras realidades posibles.
Ante el despojo de los pueblos, nosotras, las feministas, conocemos tanto el dolor y la indignación así como sus orígenes, sabemos muy bien que se trata de una violencia sistémica que viene de los países del Norte hacia los países del sur y los pactos entre todos ellos que desconocen a sus propios pueblos y esgrimen discursos nacionalistas cuando son pertinentes.
Defensoras del Consejo de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) y compañeras de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras, tras una jornada de protestas ante la lectura de sentencia de David Castillo, encontrado coautor intelectual del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres, denunciaron que, el 20 y 21 de junio, mientras acampaban en los bajos del Congreso Nacional (CN), agentes de la Policía Nacional llegaron al sitio con una actitud intimidatoria y amenazante hacia las defensoras y compañeros que se encontraban en el campamento.
Las defensoras afirmaron que los policías llegaron al CN a tomarle fotografías a ellas y sus familias sin su consentimiento, registrar arbitrariamente a los compañeros, y amenazar a quienes se encontraban en el campamento, alegando de que «sin importar el Gobierno, ellos eran la autoridad», ante este hecho, las compañeras se indignaron y le exigieron a los agentes policiales retirarse del lugar inmediatamente.
Los policías al observar la oposición de nuestras compañeras, amenazaron con traer más agentes para desalojarlas del lugar, y, al mismo tiempo, infirieron comentarios autoritarios y violentos como “¿Quiénes se creen ustedes para gritarnos así?, nosotros somos la ley”.
Desde la Red Nacional de Defensoras, denunciamos estos hechos intimidatorios y respaldamos que la acción de protesta realizada por las comunidades del COPINH, en la capital de Honduras, es una acción legítima y reivindicativa que busca señalar a los autores intelectuales vinculados con el asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres.
Hacemos un llamado urgente al mecanismo de protección a defensores de derechos humanos y a las instancias correspondientes del Estado hondureño para que garantice la seguridad a nuestras compañeras y compañeros del COPINH.
Martes 21 de junio del 2022
Alertamos que la defensora del Movimiento Independiente Indígena Lenca de La Paz Honduras (MILPAH), María Felícita López, ha recibido muchas agresiones, entre ellas al menos tres amenazas a muerte, en lo que va del año 2022.
Estas constantes amenazas surgen a partir de la lucha que Felícita ha emprendido, desde hace muchos años, en defensa de los territorios indígenas, los derechos de las mujeres, y los bienes comunes de la naturaleza, frente a empresarios, terratenientes y políticos que buscan instalar proyectos extractivistas en los territorios sin consultar a las comunidades.
Desde la Red Nacional de Defensoras denunciamos estos hechos de violencia y respaldamos a nuestra compañera María Felícita López, lideresa indígena lenca que lucha por su pueblo, los territorios y la vida de las mujeres.
Hacemos un llamado enérgico al Mecanismo de Protección a Defensores de Derechos Humanos y a las instancias correspondientes del Estado hondureño, para que garanticen la seguridad de nuestra compañera María Felicita López y su familia.
Viernes 10 de junio del 2022
Más de 60 defensoras de la Empresa Asociativa Las Galileas, miembras de la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), se mantienen bajo zozobra, ya que en las cercanías de la comunidad 23 de octubre, ubicada en Jutiapa, Atlántida, hombres fuertemente armados con indumentaria de una empresa de seguridad privada, intimidan y amenazan a más de 60 defensoras que realizan una recuperación de tierra.
Hace unos días, llegaron por primera vez a intimidar al grupo campesino, y regresaron ayer en horas de la tarde con más hombres armados.
Desde la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras condenamos enérgicamente este hecho, que en el pasado ha tenido como resultado el asesinato de compañeras y compañeros, que aún continúan en total impunidad.
Exigimos a los órganos competentes garantizar la seguridad de las defensoras y sus familias, quienes realizan un proceso legítimo de recuperación territorial.
26 de mayo de 2022
Compañeras defensoras de la Organización Fraternal Negra Hondureña (Ofraneh), denunciaron que en la comunidad garífuna, Río Tinto, ubicada en Tela, Atlántida, personas desconocidas, asesinaron al líder garífuna y exmiembro del patronato de la comunidad, Alonso Salgado, en horas de la noche del 1 de mayo frente a la vivienda de la lideresa, profesora y secretaria del patronato, Zury Quintanilla, quien resultó gravemente herida luego de que los asesinos ingresaran a su casa de habitación con la clara intención de también acabar con su vida.
No es la primera vez que Río Tinto atraviesa situaciones de suma violencia, ya que, en mayo de 2020, Edwin Fernández fue asesinado por el crimen organizado, cuando las restricciones por el virus del Covid-19 estaban en su punto máximo.
Desde la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras condenamos enérgicamente este hecho, y exigimos al Gobierno de Honduras y sus órganos competentes, dar con los responsables de este atroz crimen, así como exigir un cese a las políticas de exterminio contra las defensoras y los defensores de la tierra.
Durante años, el pueblo garífuna se ha mantenido en constante lucha y resistencia contra el capital privado y extranjero que busca lucrarse mediante el despojo de los territorios ancestrales de las comunidades.
3 de mayo de 2022